Las Autopistas del Mar quieren ser aún más sostenibles
Desde su puesta en marcha en 2001 por parte de la Unión Europea, las Autopistas del Mar se han presentado como rutas de corta distancia más seguras, sostenibles y competitivas. Pero la apuesta debe ir a más, especialmente en el ámbito de la reducción del impacto ambiental generado por los buques que las surcan. Puertos y navieras se reunieron en Barcelona para poner en común cómo conseguir un transporte marítimo más sostenible.
El concepto de «Autopistas del Mar» se remonta a 2001, cuando se plasmó en el Libro Blanco de la Comisión Europea (CE) sobre política de transportes. Ya nació con la voluntad de conseguir unas líneas de transporte más respetuosas con el medio ambiente. La sostenibilidad se centra en el fomento de la intermodalidad, en tanto el transporte marítimo de mercancías y pasajeros tienen unas externalidades mucho más reducidas, por tonelada o por persona transportada, que el transporte por carretera que gasta más combustible, genera más emisiones contaminantes, poluciona más las zonas habitadas, congestiona las vías de comunicación y tiene índices de siniestralidad mucho más elevados.
Más de década y media después de los primeros pasos de las Autopistas del Mar, las ventajas del transporte marítimo sobre el terrestre son más que patentes. Por ejemplo, en 2018 se estimó que, gracias a estas rutas, el Port de Barcelona desplazó de la carretera más de 148.000 UTI (Unidades de Transporte Intermodal, básicamente camiones y tráileres), lo que se tradujo en unos beneficios sociales (como reducción de accidentes, mayor fluidez en carreteras y autopistas, menores emisiones de dióxido de carbono, etc.) valorados en unos 129 millones de euros.
Tanto navieras como puertos están trabajando en ver qué pueden hacer para presentar opciones aún más sostenibles para estas rutas. En general, todos los actores coinciden en que es fundamental reducir las emisiones de gases contaminantes (tanto de los barcos en ruta como de estos en puerto o de las instalaciones y la operativa portuaria misma) y la principal vía para lograrlo es a través de una apuesta firme por la innovación.
Esta voluntad de ir a más en la sostenibilidad de las autopistas del mar fue el eje de la conferencia Motorways of the Sea in the Western Mediterranean celebrada el 4 de abril en Barcelona con los principales puertos ribereños y las navieras líderes que operan en sus aguas y organizada por la Escuela Europea Intermodal Transport en el marco del Proyecto TransLogMED.
¿Por qué los puertos se están poniendo en primera línea en la lucha por disminuir al máximo el impacto ambiental? Desde los organismos europeos, Isabelle Ryckbost, secretaria general de The European Sea Ports Organisation (ESPO), apuntó una explicación a tener muy en cuenta, “los puertos juegan un rol muy importante en el ámbito medioambiental puesto que en ellos se combina tanto el interés comercial como el interés público”.
Para completar su intervención, Ryckbost también añadió que “aunque las autoridades portuarias no son grandes fuentes de contaminación en sí mismas, en los puertos se cruzan cadenas logísticas en las que encontramos algunos de los principales emisores”.
Uno de los puertos mediterráneos líderes en sostenibilidad es Génova. Silvio Ferrando, Marketing and International Business Manager del puerto ligur, señaló en el evento de Barcelona la importancia de que “los puertos asuman su responsabilidad frente a las áreas residenciales que los rodean”. Asimismo, y centrándose en el caso genovés destacó que “se está invirtiendo en infraestructuras para la producción de energía proveniente de fuentes renovables, como energía solar o eólica y en la distribución de LNG (gas natural licuado).”
El Port de Barcelona también se alinea con la voluntad de reducir el impacto medioambiental. En este sentido, la presidenta del Port de Barcelona, Mercè Conesa, constató que, con la implantación de unas autopistas del mar más sostenibles, se luchaba contra un problema tan grave como es el cambio climático: “los derechos de la ciudadanía son importantes, pero también el respetar y cuidar la ciudad”.
Entrando en detalle sobre las medidas a tomar por los puertos, la descarbonización es un concepto importante para minimizar el impacto medioambiental de las actividades. A través de ella, “recortaremos el gasto energético y la emisión de los gases de efecto invernadero”, tal y como explicó Camille Bourgeon, representante del secretariado de la International Maritime Organisation (IMO).
El responsable de este organismo fue todavía más más allá en la concreción de estas medidas al incidir en que “la importancia radica en la eficiencia energética de la operativa de los buques, por ejemplo, reduciendo los tiempos de espera de los barcos para entrar en el puerto”.
Otro aspecto a tener en cuenta son las diferencias regionales entre los puertos del Mediterráneo occidental. Oscar Oliver, director general del Centre d'Etudes des Transports pour la Méditerranée Occidentale (CETMO), señaló una vía para reducir estos contrastes centrada en “la cooperación entre los enclaves del norte de África y los del sur de Europa, así, estos últimos podrían transmitir sus buenas prácticas y se lograrían unas rutas de transporte más sostenibles”.
Por su parte, Francesco Maria di Majo, presidente del puerto de Roma, incidió durante su intervención en el evento de Barcelona en la importancia de buscar incentivos “para facilitar que las navieras inviertan en las mejores tecnologías disponibles”; y expuso como ejemplo concreto “la reducción de tasas o tarifas”.
Tanto navieras como puertos están trabajando en ver qué pueden hacer para presentar opciones aún más sostenibles para estas rutas
La visión de las navieras
Desde el punto de vista de las navieras, su manera de mejorar la gestión medioambiental de las autopistas del mar es a través de lograr una mayor eficiencia en el uso del combustible que hacen sus navíos, tanto en ruta como en puerto.
Para lograr esta eficiencia, los responsables de las principales compañías preguntados también señalaron la importancia de incidir en la innovación, en la misma línea que comentaron los representantes portuarios. Matteo Catani, CEO de Grandi Navi Veloci (GNV), consideró muy importante “profundizar en la relación con los puertos para viabilizar las nuevas tecnologías o soluciones”, y también apuntó que debe irse más allá de las declaraciones de buena voluntad y “que deben acelerarse estos procesos para reducir el impacto ecológico de cara al futuro inmediato”.
Catani también quiso recordar que “vendrán muchos desafíos, como la especulación o la manera en la que la oferta de suministro de combustible cambia a través de la regulación”, en clara alusión a la regulación que se espera para 2020 y que implicará cambios en el fuel empleado en el transporte marítimo. En especial, esta legislación busca reducir el azufre usado en estos carburantes para navíos. Para el alto cargo de GNV, estas cuestiones también serán oportunidades para lograr los objetivos planteados en esta nueva etapa de las Autopistas del Mar.
Por su parte, desde Grimaldi Group y a través de Guido Grimaldi, Corporate Short Sea Shipping Commercial Director, se resaltaron soluciones por las que apuesta esta naviera. En especial, destacó un sistema de baterías de litio en sus barcos que “permiten almacenar electricidad durante la navegación y luego la suministran a la nave cuando está amarrada en el puerto”.
A día de hoy, estos sistemas se están instalando instalado actualmente en dos buques de la compañía, el Cruise Roma y Cruise Barcelona, ambos operan desde el Port de Barcelona y los enclaves italianos de Porto Torres y Civitavecchia. Los trabajos para instalar estas mejoras implican ampliar la eslora de cada nave en treinta metros, llegando hasta los 255 metros totales. El Cruise Roma ya está realizando las pruebas de navegación para certificar las ventajas de este nuevo sistema.
Además, Guido Grimaldi recordó que ambos buques se dotarán depuradores de gases (scrubbers). Estos dispositivos son una de las vías más económicas para lograr que los buques reduzcan las emisiones contaminantes generadas. La combinación de este sistema y baterías conforman la innovadora apuesta de Grimaldi para las Autopistas de Mar.