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¿Cómo se mide la innovación de un país?

La Comisión Europea ha publicado recientemente el ‘European Innovation Scoreboard 2023’, un análisis comparativo sobre la capacidad innovadora de los diferentes países de la UE. El ’Global Innovation Index’ (GII) o el ‘Índice de innovación de Bloomberg’ también elaboran rankings de países en función de su capacidad innovadora. Pero, ¿Cómo logran medir estos índices la innovación de un país?

Publicado el 01.09.2023

Carles Rúa es Jefe de Innovación del Port de Barcelona y Director del Máster Executive en Supply Chain Management de la UPC.

Los criterios de innovación de un país pueden aplicarse en ámbitos microeconómicos, como una ciudad o empresa, donde también se combinan multitud de factores. (Getty Images)

La Comisión Europea publica anualmente, desde 2001, el European Innovation Scoreboard (EIS), cuya última versión vio la luz el pasado julio. Su objetivo es proporcionar una evaluación comparativa del estado de la investigación y de la innovación de los Estados Miembros de la UE y de las debilidades y fortalezas relativas a sus sistemas de investigación e innovación. 

La metodología se ha ido adaptando con el tiempo, con una última revisión importante en 2021.

En base a la puntuación obtenida, el EIS clasifica los países en cuatro categorías, según su capacidad innovadora:

  • Líderes en innovación, encabezados por Dinamarca y seguidos por Suecia, Finlandia, Holanda y Bélgica.
  • Fuertemente innovadores, donde se incluyen Austria, Alemania, Luxemburgo, Irlanda, Chipre y Francia. Este grupo y el anterior son los que obtienen un índice superior a la media europea.
  • Innovadores moderados, grupo en el que encontramos a Estonia, Eslovenia, Chequia, Italia, España, Malta, Portugal, Lituania, Grecia y Hungría
  • Innovadores emergentes, donde se encuentran Croacia, Eslovaquia, Polonia, Letonia, Bulgaria y Rumanía.

Cómo se elabora el índice

Para confeccionar este índice, se han considerado cuatro grandes tipos de actividades

  • Condiciones de entorno ajenas a la innovación empresarial
  • Inversiones, tanto públicas como privadas, en innovación
  • Actividades innovadoras desarrolladas por las empresas
  • Impacto, que mide los efectos económicos, sociales y ambientales de la innovación. 

Cada uno de estos tipos se divide a su vez en tres dimensiones, sumando un total de 12 elementos a analizar. Para cada uno se han definido dos o tres indicadores, según el caso. Así, el índice resultante es la integración de 32 medidas independientes.

Así, podemos entender cómo se mide la innovación de un país revisando los indicadores que se utilizan y qué datos nos proporcionan.

Condiciones del entorno

Hacen referencia a los principales impulsores de la innovación externos a la empresa y diferencian tres dimensiones: 

  • La disponibilidad de recursos humanos altamente formados
  • El atractivo de los sistemas de investigación del país
  • El grado de digitalización nacional

 

1. Formación de los recursos humanos 

Se utilizan tres indicadores: 

  • El número de graduados doctorados en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas
  • El porcentaje de población de 25 a 34 años con formación superior

El número de población entre 25 a 64 años involucrada en actividades de formación permanente.

 

2. El atractivo del sistema de investigación

Para medir este indicador, se consideran:

  • El número de publicaciones científicas elaboradas con colaboración internacional (co-publicación)
  • El número de publicaciones excelentes (aquellas que se encuentran entre el 10% de las más citadas a nivel internacional)
  • El número de estudiantes de doctorado extranjeros respecto al total de doctorandos del país

 

3. Grado de digitalización del país 

Se usan dos indicadores: 

  • El porcentaje de empresas que tienen contratado un ancho de banda superior a 100 Mb/s
  • El número de personas que disponen de altos conocimientos digitales en base al uso que hacen de Internet La innovación de un país se mide según una serie de indicadores. (Getty Images)

Inversiones públicas y privadas

Se analizan tres dimensiones:

  1. Financiación y apoyo a la innovación a través de tres indicadores: la inversión privada a terceros (inversión en venture capital); el gasto público en universidades y centros de investigación; y las subvenciones directas del gobierno a actividades de I+D.
  2. Inversión de las empresas privadas en I+D, mediante tres indicadores: presupuesto en I+D e innovación (no I+D) y los gastos en innovación por empleado.
  3. El uso de las tecnologías de la información, a través de dos indicadores. 

El sector privado y la innovación

Las actividades de Innovación intentan determinar cómo el sector privado actúa ante la innovación. 

Para ello analiza tres dimensiones: 

  1. El esfuerzo innovador de las empresas, evaluado con el número de PYMEs que han introducido innovaciones de producto en el mercado o innovaciones de proceso en sus propias organizaciones
  2. La colaboración en materia de innovación, que se mide mediante los acuerdos de colaboración entre PYMEs, las publicaciones científicas realizadas en colaboración público-privada y la movilidad en puestos de trabajo en ciencia y tecnología
  3. Los intangibles de propiedad intelectual, que se miden a través de los recursos generados por los derechos de propiedad intelectual y el número de patentes y registros de marca efectuados.

El impacto analiza los resultados de las anteriores actividades innovadores, mediante tres dimensiones: 

  1. En el empleo, que se mide mediante el porcentaje de empleo en áreas intensivas en conocimiento y en empresas innovadoras; 
  2. En la economía, que emplea tres indicadores: las exportaciones de productos tecnológicos, de servicios de conocimiento y las ventas de productos innovadores.
  3. El impacto en la sostenibilidad, medido a través de la productividad de los recursos, de las emisiones de partículas al ambiente y del desarrollo de las tecnologías vinculadas al medio ambiente.

Evaluación por regiones

Como extensión al EIS, la Comisión Europea también ha publicado el Regional Innovation Scoreboard 2023 (RIS), que proporciona una evaluación comparativa de los sistemas de innovación en 239 regiones de 22 países de la UE, Noruega, Serbia, Suiza y el Reino Unido a los que se unen Chipre, Estonia, Letonia, Luxemburgo y Malta que se incluyen a nivel de país. 

En este caso, sin embargo, se limita el número de indicadores a 21 respecto a los 32 que integra el EIS  debido a que algunos de los indicadores no están disponibles a nivel regional.

Las regiones europeas también se han clasificado en cuatro grandes grupos

  1. Líderes en innovación (36 regiones)
  2. Regiones fuertemente innovadoras (70 regiones)
  3. Regiones moderadamente innovadoras (69 regiones) 
  4. Regiones emergentes innovadoras (64 regiones). 

En este análisis existe una mayor segmentación, dividiendo cada uno de estos grupos en tres subgrupos, asignando para cada grupo un “+” al subgrupo con mejor desempeño y un “-“ al subgrupo con peor desempeño.

Medir la capacidad de innovación es un procedimiento complejo que implica analizar múltiples dimensiones y establecer decenas de indicadores y métricas que evalúen la habilidad de un país para generar, adoptar y aplicar nuevas ideas, tecnologías, productos y procesos

Otros índices de innovación

Basado en datos objetivos y subjetivos de múltiples fuentes, el Global Innovation Index (GII) es un ranking anual de países que mide su capacidad y su éxito en materia de innovación. Lo publica desde 2007 la World Intellectual Property Organization (WIPO), en asociación con el Portulans Institute, varios socios corporativos y académicos, y el Consejo Asesor de GII.

Para establecer el ranking, el GII analiza cuatro criterios diferentes para los cuáles establece diversos indicadores. Estos criterios son: la inversión en ciencia e innovación, el progreso tecnológico, el nivel de adopción de nuevas tecnologías y el impacto socioeconómico.

La elaboración del índice global es bastante compleja. De entrada, considera dos subíndices, la media de los cuáles genera el índice global. 

Estos dos subíndices están relacionados respectivamente con los Inputs (elementos de la economía del país que facilitan la innovación) y los Outputs (resultados de las actividades de innovación). El subíndice vinculado a los Inputs se subdivide a su vez en cinco pilares, mientras que el asociado a los Outputs se subdivide en dos pilares:

Para los inputs:

  1. Las instituciones
  2. El capital humano y la investigación
  3. Infraestructuras
  4. Grado de sofisticación del mercado
  5. Grado de sofisticación de los negocios

Para los outputs o resultados:

  1.  Resultados en conocimiento y tecnología
  2. Resultados en creatividad

Para medir estos siete pilares se utilizan 81 indicadores diferentes, de los cuales 65 son valores numéricos directos, 13 son indicadores compuestos y 3 son resultados de encuestas del World Economic Forum Executive Opinion Survey. Estos indicadores proceden de fuentes muy diversas pero reconocidas internacionalmente. Por ejemplo:

  • el Índice de efectividad gubernamental que elabora el World Bank
  • los costes de indemnización por despido
  • el gasto del país en educación, en porcentaje del PIB, según la UNESCO
  • los resultados del estudio PISA de la OCDE sobre las capacidades en lectura, matemáticas y ciencias 
  • el número de graduados en ciencia e ingeniería
  • el número de investigadores (full time) por millón de habitantes
  • el nivel de acceso y uso de las tecnologías de la información y las telecomunicaciones
  • la electricidad consumida por millón de habitantes
  • el índice de desempeño logístico, según el World Bank
  • el número de certificaciones ambientales ISO 14000
  • la inversión en venture capital
  • los aranceles medios aplicados a la importación
  • el porcentaje de empleos intensivos en conocimiento
  • las importaciones de productos de alta tecnología; o los recursos generados por las patentes

Así, según el ranking Global Innovation Index 2022, el último publicado y que analiza 132 economías, el top 10 mundial está encabezado por Suiza y le siguen, por este orden, Estados Unidos, Suecia, Reino Unido, Países Bajos, la República de Corea, Singapur, Alemania, Finlandia y Dinamarca. 

Estos indicadores proporcionarán información de los aspectos deben cambiarse en las políticas de actuación de los Estados . (Getty Images)

La UNCTAD (United Nations Conference on Trade and Development) publica el Technology and Innovation Report, la última versión del cual vio la luz en marzo de 2023. Este informe incorpora el Readiness for Frontier Technologies Index que, como su nombre indica, muestra lo preparados están los 166 países que analiza para asumir las nuevas tecnologías. 

En este caso el índice se compone de cinco categorías de indicadores:

  • El despliegue de las tecnologías de la información y comunicaciones (ICT), que incluye el porcentaje de la población usuaria de internet junto con la velocidad media de descarga de la red.
  • Las habilidades y conocimientos de la población, que incluye el porcentaje de la población que trabaja en puestos de trabajo de alto nivel tecnológico y los años de escolarización.
  • La actividad de investigación y desarrollo, que  incluye el número de publicaciones científicas y el número de patentes.
  • La actividad industrial, que incluye el porcentaje de exportaciones de productos de alta tecnología sobre el total de bienes y el porcentaje de exportaciones de servicios digitales sobre el total de servicios.
  • El acceso a la financiación que incluye el porcentaje del PIB dedicado al crédito privado.

Según este ranking, el top 10 mundial está liderado por Estados Unidos y seguido por Suecia, Singapur, Suiza, Holanda, la República de Corea, Alemania, Finlandia, China (Hong Kong, SAR) y Bélgica.

Desde 2017, Bloomberg publica el Bloomberg Innovation Index de los países más innovadores. Utilizan más de 200 fuentes de información agrupadas en siete grandes categorías: 

  1. La intensidad en investigación y desarrollo (relación entre el gasto en I+D y el PIB)
  2. El valor añadido de su producción
  3. La productividad: PIB por hora trabajada
  4. La densidad de la alta tecnología: número de empresas de alta tecnología domiciliadas en el país
  5. La concentración de la investigación: profesionales y científicos por millón de habitantes
  6. La eficiencia terciaria: capital humano disponible para la innovación a través de titulaciones y matriculación de alumnos
  7. Patentes: solicitadas y concedidas por PIB

Con datos basados en 2021, el top 10 de los 60 países analizados, lo encabeza Corea del Sur y le siguen Singapur, Suiza, Alemania, Suecia, Estados Unidos, Finlandia, Dinamarca, Israel y Francia. 

Conclusiones: un proceso que va más allá de los números

Medir la capacidad de innovación de un país es un proceso complejo que implica analizar múltiples dimensiones y establecer, en general, decenas de indicadores y métricas que evalúen su habilidad para generar, adoptar y aplicar nuevas ideas, tecnologías, productos y procesos. En general, todas estas dimensiones se acaban sintetizando en un valor numérico único que establece la posición del país respecto a los demás. 

Aunque más importante que este valor numérico único son los valores parciales de los diferentes indicadores que nos proporcionarán información para saber en qué aspectos deben cambiarse en las políticas de actuación de los Estados para escalar posiciones en estos ránkings.

Creemos que este esquema también se puede trasladar a ámbitos microeconómicos. Así, la innovación en una ciudad, en una empresa o en un departamento es también un problema multicriterio donde se combinan multitud de factores: que una empresa sea innovadora no depende únicamente de lo que invierte en I+D+i, sino que se trata de un aspecto vinculado a su cultura y que afecta a ámbitos tan diversos como, además de a temas presupuestarios, a su internacionalización, la colaboración con otras empresas, la formación de sus empleados, la tecnología que utiliza o las patentes generadas, entre muchos otros elementos.

 

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