Velocidad de «crucero» hacia la sostenibilidad
La industria de los cruceros está apostando por la sostenibilidad para adecuarse a las necesidades sociales y medioambientales, tanto en alta mar como en las llegadas, estancias y salidas de ciudades portuarias con tráfico de navíos turísticos. Repasamos casos de éxito en marcha y las innovaciones que están haciendo posible esta evolución sostenible en la industria crucerística.
El debate sobre cómo lograr un turismo más sostenible está en la agenda de las grandes urbes del planeta. Y en las ciudades portuarias, un dossier muy importante es la gestión los cruceros.
Según datos de la Asociación Internacional de Líneas de Cruceros (CLIA), en 2024 este tipo de navíos transportaron a 34,6 millones de pasajeros por todo el mundo. Los principales puertos del planeta pueden manejar varios millones de pasajeros anualmente. El principal puerto en cuanto a número de viajeros es Miami, por donde pasaron 8,2 millones de pasajeros el año pasado, mientras que Barcelona gestionó 3,6 millones de movimientos de viajeros, lo que la convierte en el principal puerto europeo en este ámbito.
Con estos volúmenes de llegada y salidas de cruceros, el Port de Barcelona y las navieras que operan en él han apostado por una serie de medidas para garantizar que su impacto no es riesgo para la sostenibilidad, teniendo en cuenta los datos actuales del Port de Barcelona
- Las emisiones de CO2 provenientes de las actividades marítimas representan el 10,9% del total de la ciudad, incluyendo no sólo las emisiones de cruceros sino de toda la actividad portuaria.
- Si se mira exclusivamente la actividad de los cruceros, estas emisiones suponen el 1,3% del total en la capital catalana y las de NOx, el 0,7%.
- En cuanto al consumo de agua, el 80% de los cruceros que hacen escala en Barcelona no se aprovisionan de agua porque no la necesitan. El consumo de agua por parte de los cruceros implica el 0,09% del total de agua consumida en Barcelona.
La ciudad y los cruceros
Con todas estas cifras sobre la mesa, el Port de Barcelona anunció el pasado verano una nueva terminal de cruceros que sustituirá a las actuales A, B y C (las más antiguas) tras un convenio firmado con el Ayuntamiento de la ciudad. Esta nueva instalación se ubicará en el muelle Adossat, donde se concentra la actividad crucerista, y está operada por Creuers del Port de Barcelona (Global Ports Holding). El diseño ha corrido a cargo del estudio de arquitectura b720-Fermín Vázquez Arquitectos.
Estas nuevas instalaciones van enfocadas a mejorar la movilidad de los pasajeros y hacerla más sostenible, dentro de una estrategia del Port de Barcelona para promover la sostenibilidad de manera transversal en sus actuaciones. Así lo manifestó su presidente, José Alberto Carbonell, en la presentación del proyecto: «estas actuaciones suponen una inversión público-privada de 185 millones de euros, que se suman a las inversiones realizadas en el marco del acuerdo de 2018, y confirman la apuesta del Port de Barcelona por un desarrollo sostenible de la actividad de cruceros», explicó.
Esta nueva terminal tendrá una capacidad para dar servicio a 7.000 pasajeros y estará bajo control público para mantener los estándares de sostenibilidad, mientras que las otras (la D, E, G, y la H) estarán operadas por navieras privadas como Carnival, MSC o Royal Caribbean.
La futura terminal G, por ejemplo, ya está adjudicada a una empresa conjunta formada por Royal Caribbean Group y Cruise Terminals International (CTI). La nueva instalación requerirá una inversión superior a 85 millones de euros y se prevé que esté operativa en la primavera de 2027, tras el cierre de la terminal Sur del WTC en 2026. El proyecto destaca por su apuesta por la sostenibilidad energética y ambiental.
- La futura terminal incorpora espacios reservados para los sistemas OPS (onshore power supply) que actualmente se están instalando en el muelle Adossat, permitiendo que los cruceros se conecten a la red eléctrica durante su atraque y eliminen así las emisiones.
- El diseño busca la máxima eficiencia energética mediante placas fotovoltaicas y otras instalaciones de energía renovable, con el objetivo de alcanzar un balance de cero emisiones.
- La instalación está diseñada específicamente para impulsar el tráfico de puerto base —pasajeros que embarcan y desembarcan en Barcelona—, siguiendo la estrategia del puerto para incrementar este tipo de operaciones de mayor valor añadido para la ciudad. En este sentido, el proyecto prioriza una movilidad eficiente, confortable y sostenible para los pasajeros, tanto dentro de la terminal como en su conectividad con la ciudad, el aeropuerto y la red ferroviaria. Los espacios han sido concebidos para garantizar una operativa fluida de los flujos de pasajeros, aspecto fundamental para una terminal orientada al puerto base, estrategia en la que Royal Caribbean apuesta firmemente en Barcelona.
El proyecto de nuevas terminales para cruceros también va acompañado de un plan de movilidad sostenible que se centra en tres ejes:
- Desdoblamiento del puente Porta d’Europa para mejorar la movilidad de bicicletas y peatones.
- La construcción de un corredor urbano en el frente litoral de Montjuïc destinado al transporte público, bicicletas y peatones. Conectará la plaza de Drassanes con la Martina del Prat Vermell.
- Evaluación de la movilidad generada por los cruceros para gestionar mejor la movilidad de sus pasajeros cuando bajen a tierra.

El importante papel del Onshore Power Supply (OPS)
Entrando más en detalle sobre estos ejes, ya se están desarrollando proyectos concretos para complementar la nueva terminal. Tal es el caso del sistema Onshore Power Supply (OPS) de la terminal de MSC en el muelle Adossat. El Port de Barcelona ha iniciado junto a la empresa danesa PowerCon A/S el desarrollo del proyecto constructivo del primer sistema de electrificación de muelles (OPS) para cruceros en sus instalaciones, ubicado en la terminal de MSC del muelle Adossat. PowerCon, adjudicataria del proyecto, se encargará tanto de la obra civil necesaria como del despliegue del cableado hasta el centro de distribución que gestionará el suministro eléctrico.
- Los cruceros podrán conectarse a la red eléctrica del puerto y poder apagar sus motores auxiliares.
Según Ana Arévalo, Head of Shorepower department en el Port de Barcelona "el sistema estará operativo en 2027, coincidiendo con la puesta en marcha de la subestación que suministrará electricidad 100% renovable a todas las terminales. "Será un año decisivo para la electrificación de los muelles del Port de Barcelona", señala.
Este proyecto se enmarca en el Plan Nexigen, que contempla inversiones de cerca de 200 millones de euros. Actualmente, ya están en funcionamiento dos sistemas OPS en fase piloto en las terminales BEST y Grimaldi Terminal Barcelona, que permiten electrificar buques portacontenedores y ferris de la ruta Barcelona-Palma. Paralelamente, avanzan las obras de la nueva subestación Port y el despliegue de la red de media tensión que llevará energía renovable a todos los muelles que instalarán sistemas OPS.
Además de la puesta en marcha de la nueva terminal, el Port de Barcelona trabaja en un amplio abanico de medidas para mejorar la sostenibilidad en su operativa. Un primer ejemplo de esta estrategia es la continua mejora de los servicios de gestión de residuos MARPOL, un aspecto fundamental para reducir el impacto de los cruceros

La mitad de los cruceristas llegan a Barcelona a bordo de un crucero operado por Gas Natural
También hay que destacar toda la labor que se hace desde el Port ya lleva un tiempo utilizando el Gas Natural Licuado (GNL) como combustible de transición hacia fuentes de cero emisiones, este año uno de cada cinco cruceros que han pasado por Barcelona lo han utilizado. Conviene recordar que con este fuel se elimina el 100% de las emisiones de óxidos de azufre (SOx) y las partículas en suspensión y reduce hasta un 70% las emisiones de óxidos de nitrógeno y un 20% las emisiones de CO₂.
En este sentido, en 2024, el Port cerró con un nuevo récord en el suministro de GNL, al proporcionar 229.750 m³ a diferentes navíos, un 60,5% más con respecto al año anterior. De estos barcos, un 23% fueron cruceros, lo que implicó reducir sus emisiones de NOx en una quinta parte.
Una tendencia que irá a más. Buena parte de las navieras del mundo —MSC, Costa Crociere, Carnival Corporation, Aida Cruises…— están aumentando los barcos de pasajeros impulsados por GNL.
- En 2024, un 45,%% de los cruceristas llegados a Barcelona lo hicieron a bordo de un crucero que operaba con Gas Natural Licuado.
Como apunte, esta estrategia de impulsar combustibles sostenibles se enmarca en el Plan de Transición Energética del Port de Barcelona que, de cara a 2030, quiere reducir un 50% las emisiones de gases de efecto invernadero y busca lograr la neutralidad climática para 2050.
Sistemas de monitorización digital en tiempo real para evitar aglomeraciones
El Port de Barcelona también ha sido el escenario de una prueba piloto para la gestión de los cruceristas y optimizarla, lo que contribuye a hacer sostenible toda la operativa. La empresa Delonia ha desarrollado Smart Mobility Analytics (SMA), una solución tecnológica innovadora para optimizar la gestión de terminales de cruceros mediante inteligencia artificial y análisis de imágenes. El proyecto, financiado por el Fondo Puertos 4.0 de Puertos del Estado, se estructuró en cinco paquetes de trabajo que abarcaron desde la infraestructura de captura y procesamiento edge, desarrollo de IA avanzada, plataforma de datos en la nube con Kafka y Druid, hasta aplicaciones para usuarios finales.
- El desafío: el desembarque masivo de pasajeros y vehículos en periodos cortos genera problemas logísticos que afectan la experiencia del usuario y el entorno portuario. Los gestores necesitan información en tiempo real para tomar decisiones operativas inmediatas, planificar estratégicamente y identificar puntos de congestión.
- La solución: SMA utiliza algoritmos de redes neuronales para analizar imágenes captadas por cámaras y proporciona información en tiempo real sobre métricas clave como ocupación de aparcamientos, densidad de colas y flujos de actividad. El sistema ofrece datos a agentes de movilidad, pasajeros y transportistas, optimizando operaciones con infraestructura mínima.
- Resultados: la plataforma ofrece visibilidad en tiempo real, escalabilidad eficiente, capacidad de planificación anticipada mediante análisis de datos históricos y optimización de costes bajo modelo SaaS. El sistema ha sido validado exitosamente en condiciones reales en los puertos de Barcelona y Algeciras, demostrando estabilidad, precisión y eficacia operativa.
Del Báltico a Alaska, muchos más ejemplos
El impulso a políticas de descarbonización de los cruceros está en la agenda de todos los puertos que operan navíos turísticos. Puertos bálticos como Kristiansand y Oslo (Noruega), Rostock (Alemania), Copenhagen y Aarhus (Dinamarca y Estocolmo (Suecia), ya tienen OPS operativas o en proyecto. Copenhague, en concreto, cuenta con un sistema OPS desde el año pasado que aspira a poder servir a cinco cruceros simultáneamente en 2028.
- Precisamente en el entorno del Báltico surgió una iniciativa pionera en la sostenibilidad en el sector de los cruceros, como fue la publicación de un manifiesto firmado por los 31 puertos integrantes de Cruise Baltic donde se comprometen a hacer una industria crucerística más respetuosa con el medio ambiente a lo largo de la presente década.
Más allá del Báltico, otros puertos del norte de Europa como Amsterdam, Bergen o Stavanger están apostando fuerte por implementar medidas encaminadas a lograr una mayor eficiencia energética y reducción de emisiones nocivas.
Si ampliamos el foco, América del Norte es el referente crucerista global con Miami liderando indiscutiblemente el sector, pero también hay otros dos puertos en Florida en el top 5 mundial como son: Port Canaveral (2ª posición) y Port Everglades (5ª). Aunque desde el punto de vista de la sustentabilidad conviene fijarse en latitudes más septentrionales para encontrar la primera iniciativa mundial en este campo.
- El Pacific Northwest to Alaska Green Corridor es un proyecto impulsado por los puertos de Seattle, varios de Alaska, Vancouver y Victoria. Básicamente, los que están en la ruta crucerística entre el estado de Washington, la Columbia Británica y Alaska. También participan navieras como Carnival, Norwegian y Royal Caribbean. Todos estos actores también buscan demostrar la viabilidad de combustibles y tecnologías de cero emisiones en las rutas de los cruceros.
Lo que resalta de este proyecto es la labor de coordinación entre puertos, armadores, productores de combustible y administraciones públicas para superar las barreras técnicas, regulatorias y financiera para llegar a la descarbonización de este tipo de transporte.

Más allá de 2030, retos y oportunidades en la descarbonización de los cruceros
Mientras que el GNL se contempla como una solución de transición, el OPS se perfila como la gran esperanza para lograr erradicar las emisiones nocivas. Según datos de CLIA, en la actualidad operan 120 cruceros equipados para conectarse a la red eléctrica terrestre, una cifra que prácticamente se doblará dentro de tres años, lo que supondrá un 80% de la flota global de este tipo de barcos. Esta asociación internacional está promoviendo este tipo de infraestructuras para lograr las cero emisiones en 2050.
- Tampoco hay que perder de vista otras tecnologías que puede ayudar a la sostenibilidad. Por ejemplo, los gemelos digitales son una vía para mejorar la eficiencia, un aspecto que no solo repercute beneficiosamente en la operativa sino también en el respeto al entorno natural.
Todas las tecnologías comentadas requieren una inversión financiera importante, por lo que los plazos tratado pueden sufrir variaciones en función de la evolución económica mundial y cómo a esta le pueden afectar situaciones conflictivas vividas recientemente.
- Y hay que tener en cuenta algunos impedimentos dentro de la propia flota de cruceros mundial. Son barcos con una vida útil muy larga (25-30 años) por lo que algunos navíos que ya llevan un tiempo operando no se adaptan bien —desde el punto de vista tecnológico— a los criterios de sostenibilidad.
De todas formas, el camino emprendido por el Port de Barcelona es el que marca la tendencia. Existe la voluntad y la tecnología para lograr que el sector de los cruceros sea realmente sostenible. Las soluciones innovadoras ya están ayudando a transformarlo para que sea beneficioso para toda la sociedad.

