Los deberes pendientes de los puertos: descarbonización, digitalización y resiliencia
La International Association of Ports and Harbors (IAPH) ha recopilado los grandes retos a los que los puertos deben hacer frente para reforzar el conjunto de la cadena de suministro. ¿Qué deberían hacer las autoridades portuarias para cumplir?
‘Closing the Gaps – key actions in digitalization, decarbonization and resilience the maritime sector’, publicado el pasado mes de octubre de 2022 por la International Association of Ports and Harbors (IAPH), aborda las tres áreas donde se han identificado más brechas por solucionar: la digitalización, descarbonización y resiliencia.
El informe se gestó en la World Ports Conference que la IAPH celebró virtualmente en junio de 2021. “Gran parte del contenido de la conferencia giró alrededor del impacto que la pandemia estaba causando y en qué podían hacer los puertos para mantener su operativa. Estos tres indicadores son el resultado de lo que las autoridades portuarias expresaron entonces como sus prioridades”, explica Victor Shieh, director de comunicación de la IAPH.
El informe, además de recopilar los retos que representan estos indicadores, propone un plan de acción concreto para cerrar la brecha existente en cada uno de ellos.
Resiliencia: infraestructuras y gobernanza
En la citada conferencia, tanto Santiago García-Milà, el presidente saliente y actual subdirector y responsable de Innovación y Estrategia de Negocio del Port de Barcelona, como Subramaniam Karuppiah, su relevo y director de general de la Autoridad Portuaria de Klang expresaron una misma idea, comparte Shieh: “Muchos de los problemas relacionados con la pandemia fueron consecuencia de cuestiones ya existentes relacionadas con la resiliencia, como la falta de inversión a largo plazo en la ampliación y mejora de las infraestructuras.”
El informe de la IAPH señala, entre otros, los siguientes asuntos a resolver:
- La pandemia de COVID-19 dejó en evidencia la incapacidad de las infraestructuras para absorber y responder a los vaivenes entre la oferta y la demanda.
- Los puertos estuvieron expuestos a las interrupciones de la capacidad de almacenamiento de sus hinterland y a la conectividad intermodal de las cadenas de suministro.
- Las lagunas en la infraestructura portuaria mundial se están tensando hasta el punto de que la crisis de la cadena de suministro no puede considerarse un acontecimiento aislado, sino que implica a todas las partes interesadas. Esta interconexión complica identificar los problemas individualmente y, por lo tanto, encontrar soluciones efectivas.
Las soluciones: colaboración, capital humano e inversiones
- “Es necesario que los puertos atraigan nuevo talento y reflexionen sobre su modelo de gobernanza. Algunos operadores marítimos, por ejemplo, ya han iniciado el cambio y están incorporando a profesionales normalmente no necesariamente vinculados con el sector. Los puertos deben hacer lo mismo para transformar su organización y conducirla hacia la innovación”, afirma el director de comunicación de la IAPH.
- Las futuras y necesarias ampliaciones portuarias deberán atraer capital privado, ya que la financiación del sector público no será suficiente.
- Elevar el rol de los puertos. De ser únicamente arrendadores (modelo landlord) a potenciales orquestadores que faciliten que la cadena de suministro gane en fluidez. Algunos puertos deben también aspirar a ser centros energéticos descarbonizados para abastecer a la industria y clusters marítimos que sirvan a sus comunidades portuarias.
- La colaboración activa entre los agentes logísticos que participan en cada punto de intercambio de mercancías, con más transparencia en la disponibilidad e intercambio de datos.
El informe, además de recopilar los retos que representan estos indicadores, propone un plan de acción concreto para cerrar la brecha existente en cada uno de ellos
Digitalización: confianza, transparencia y legislación
Sobre la digitalización, Shieh afirma que la pandemia espoleó soluciones digitales como la creación de entornos seguros para los trabajadores. “Lo que hemos visto en los últimos tres años en términos de aceleración digital ha superado con creces lo acontecido en los últimos diez”.
Aún así, el informe identifica varios retos por solucionar:
- Hace hincapié en las diferencias entre países desarrollados (e incluso, dentro de estos, no todos los puertos van al mismo ritmo) y en desarrollo (donde también existen diferencias entre ellos) en cuanto a la madurez en la adopción de sistemas de ventanilla única marítima y los port community systems. La falta de un marco legal que aborde la digitalización se cita como una de las causas principales.
- Armonizar los distintos estándares para facilitar el intercambio de información entre buques y el puerto y la interoperabilidad del sistema electrónico. Estos deberían, en teoría, seguir el Compendio de la OMI sobre facilitación y comercio electrónico.
- La reticencia del sector privado a compartir datos críticos con las autoridades públicas, y viceversa, se debe en parte a la preocupación por la ciberseguridad.
Así, el informe confirma alguna de las conclusiones que ya se habían evidenciado en recientes conferencias de puertos señalando la falta de una estandarización a nivel global en muchos aspectos, y la dificultad y reticencia en la compartición de datos como dos de las principales barreras actuales para la digitalización portuaria
Las posibles soluciones: establecer estándares comunes y una hoja de ruta
- Estandarizar el intercambio de datos entre las partes interesadas con autoridades reguladoras que proporcionen un marco legal para su estructuración e intercambio.
- Se están realizando esfuerzos para adoptar normas sólidas y comunes, liderados por varias organizaciones, como la DCSA, BIMCO, TIC 4.0, IPCSA, ITPCO y puertos como la Autoridad Marítima Portuaria de Singapur y el puerto de Rotterdam.
- Establecer comités interministeriales a nivel gubernamental encargados de diseñar un plan para implementar tanto una ventanilla única marítima como un port community system. El siguiente paso es crear la legislación apropiada en cuanto a su uso.
- El camino a seguir para impulsar la digitalización de los puertos mundiales identificado en el ejercicio #CloseTheGaps implica establecer una hoja de ruta hacia la digitalización a largo plazo y que sea realista.
- Los puertos deberían implantar un plan estratégico de ciberseguridad tomando en cuenta las necesidades tanto de sus clientes y usuarios como sus respectivos stakeholders del sector público.
Descarbonización: disponibilidad de fuentes energéticas
El tercer gran reto de los puertos identificado en el estudio es la descarbonización de su actividad. Los puertos son grandes nudos intermodales de transporte, donde coexisten y se integran el transporte terrestre (carretera y ferrocarril), el marítimo y,en algunos puertos, el fluvial; pero también en muchas ocasiones son grandes centros productivos donde la industria pesada adopta un papel relevante (refinerías, plantas regasificadoras, acerías, indústria química básica,...). La reducción de emisiones y la transición energética son quizás los principales retos del sector que, según el informe, presenta importantes brechas en este ámbito:
- Existe una importante disparidad en el CO2 emitido entre regiones. Este es uno de los principales problemas para los países en desarrollo a la hora de financiar la descarbonización del transporte marítimo, ya que los países desarrollados son los principales emisores. No obstante, las soluciones deberán ser globales para que se produzcan avances significativos en la descarbonización del sector.
- Una de las principales lagunas a las que se enfrentan los puertos es la disponibilidad de fuentes energéticas de baja o nula emisión de carbono. Para reducir las emisiones en los puertos y sus alrededores, medidas como la introducción de la conexión eléctrica a tierra para los buques atracados deben ir acompañadas de la disponibilidad de energía solar, eólica, geotérmica, mareomotriz y otras fuentes renovables que alimenten es energía eléctrica.
- La ausencia de regulación y financiación necesaria para cerrar la brecha entre el coste de producción de los combustibles cero emisiones y el de los hidrocarburos aumenta el riesgo para que los puertos que se comprometan a invertir en infraestructuras de bunkering.
Posibles soluciones: corredores verdes, generación de renovables
El estudio propone diversas soluciones para reducir esta brecha:
- Investigar las posibilidades de generar energía renovable a lo largo de sus costas, consultando a proveedores de energía eólica marina, solar e incluso nuclear, colaborando activamente con los principales proveedores mundiales de combustibles de baja y nula emisión de carbono, los institutos de investigación y las fundaciones creadas para acelerar la I+D en el uso y la adopción de nuevos combustibles alternativos.
- Se han anunciado varios corredores verdes, entre los que se encuentran los puertos de Los Ángeles y Shanghái, y los de Amberes y Montreal. Las autoridades portuarias podrían adoptar el papel de coordinadores terrestres entre las partes interesadas.
- Ofrecer incentivos a los armadores para que mejoren el rendimiento medioambiental de sus flotas mediante un sistema de cálculo basado en índices como el IAPH Environmental Ship Index, un método probado para reducir las emisiones en los muelles.
De los tres indicadores, Shieh valora el papel de la digitalización como el gran habilitador para ayudar a cerrar la brecha de los otros dos grandes retos. “Existe un gran potencial y la voluntad de todas las partes de explorar seriamente la digitalización, que puede, definitivamente, ayudar a reducir las emisiones y a mejorar la resiliencia. Mi experiencia en todo este proceso es que existe un reconocimiento genuino por parte de la industria de que muchas cosas deben arreglarse”.
La elaboración del documento: una colaboración internacional
El documento fue preparado por el World Ports Sustainability Program de la IAPH, lanzado en 2018, y que entre otras iniciativas, recoge más de doscientas mejores prácticas en sostenibilidad. El Banco Mundial también ha contribuido, en una relación que surgió con la creación conjunta de un grupo de trabajo sobre el COVID-19 dirigido a apoyar a los puertos.
“La relación con el Banco Mundial nos ha ayudado a identificar estas brechas en las infraestructuras y a crear un plan de acción tangible para lidiar con ellas”, explica.
La metodología incluyó múltiples sesiones de trabajo basadas en investigaciones previas realizadas por la Universidad de Amberes. “Nuestros asistentes del área de investigación realizaron un estudio profundo que dividimos en los diferentes temas que abarcan estos tres indicadores. Generamos varios resúmenes para las ocho regiones del mundo e invitamos a ejecutivos de puertos, logística marítima, operadores de terminales, gobiernos y académicos a estas sesiones”, recuerda Shieh.
Aunque reconoce que cerrar estas brechas suponen un reto, Shieh extrae conclusiones positivas del proceso. “Se estableció una dinámica muy positiva entre las partes que intervinieron. El diálogo entre representantes del transporte marítimo, puertos, agentes logísticos, armadores y gobiernos demuestra que el sector está preparado para afrontar y aplicar un plan de acciones para cerrar estas brechas”, concluye.