En los informes también se detectan perfiles más específicos, como “transportistas que conozcan los trámites administrativos y aduaneros para operar en el puerto y que tengan capacidad de corregir cualquier anomalía en la documentación; instaladores de componentes de megayates y barcos recreativos; ingenieros de telecomunicaciones especialistas en satelización; expertos en logística, y especialistas de trabajos en altura”, detalla Tarriño.
Otro de los requisitos imprescindibles para mejorar la empleabilidad de los jóvenes en la Comunidad Portuaria son los idiomas. “Al tratarse de un sector de ámbito internacional, el dominio del inglés es necesario”, afirma Ángel Tarriño. “Hay empresas cuya primera prueba para un puesto de instalador es el inglés. Si el candidato tiene algún déficit en conocimiento mecánico no les preocupa tanto como que no sepa inglés. Y si puede aportar un segundo idioma, todavía mejor”, aconseja el experto.
Un nuevo diseño formativo
Los resultados de estos estudios no solo han puesto en orden las necesidades profesionales de un sector en pleno proceso de transformación tecnológica. También han servido para dar visibilidad a las distintas opciones formativas, muchas de ellas desconocidas, que ofrece el sector marítimo y portuario.
Si las empresas encuentran problemas para encontrar canales y referentes para contratar, este estudio ha abierto la puerta a solucionar este tipo de cuestiones. Potenciar itinerarios de FP dual en las empresas del Port de Barcelona parece ser una excelente solución a una oferta laboral cada vez más específica y cuya dinámica cambiante requiere personas con grandes habilidades adaptativas.
Por el momento ya se han establecido una serie de actuaciones que avanzan en esta dirección. Desde la creación de una mesa de trabajo para adaptar los contenidos formativos a las necesidades del Port de Barcelona hasta proyectos de innovación formativa como Forma’t al Port, desarrollado por la Escola Europea - Intermodal Transport.
Por su parte, Barcelona Activa está impulsando la formación profesionalizadora con iniciativas como la que está llevando a cabo con el Institut de Nàutica de Barcelona, adaptando parte de un ciclo formativo como curso de formación ocupacional para personas en paro.