Virtual Gates: compartir datos para obtener soluciones inteligentes
Más de 3.000 camiones entran cada día en las instalaciones del Puerto de Barcelona en dirección a las terminales de contenedores donde, hasta hace poco, los trámites aduaneros se realizaban de forma tradicional, lo que añadía 15 minutos extra a cada operación. La colaboración de la Autoridad Portuaria de Barcelona con las terminales ha permitido desarrollar un modelo virtual que facilita su fluidez para ganar tiempo y obtener información relevante.
El 90 % de los camiones que accede a diario a las terminales lo hace sin necesidad de detener su actividad para realizar trámites burocráticos. Si tenemos en cuenta que la media de vehículos que pasan cada día es de más de 3.000, es fácil hacerse una idea de todo el tiempo que se ha ganado para poder ampliar el número de operaciones. Gracias a la implantación de las virtual gates (puertas virtuales) los trámites aduaneros se pueden realizar online, a la vez que aportan datos útiles e individualizados. «Es un concepto nuevo que responde a las necesidades del puerto. Como autoridad portuaria, nuestra misión es optimizar y agilizar todos los procesos de la infraestructura», cuenta Catalina Grimalt, CIO del Port de Barcelona, que ha liderado el desarrollo y la implantación de este sistema.
Liderando a través de la colaboración
Las puertas virtuales nacen de la voluntad de colaboración para compartir datos entre las terminales y la autoridad portuaria para avanzar en la automatización de las puertas, dando lugar a una plataforma virtual denominada «Virtual Gates», que permite tener en tiempo real la información de lo que pasa en las puertas físicas que no están gestionadas por la autoridad portuaria. Disponer de todos estos datos relacionados con las puertas físicas es uno de los ejes del enclave para desarrollar soluciones inteligentes.
Hoy en día no se entiende la excelencia en la logística si no es a través de la colaboración entre los diferentes integrantes de la cadena. A nivel documental, en el Port de Barcelona el 100 % de la documentación necesaria para la entrada o salida de un contenedor del recinto portuario se tramita de forma telemática y es compartida por todos los participantes en esta cadena (terminales, empresas de transporte, navieras, transitarios, agentes de aduana, la Aduana y la Autoridad Portuaria, entre otros).
El siguiente paso natural es no solo compartir la información documental, sino también la información física de lo que realmente está pasando y que debe coincidir con lo que indican los documentos. El concepto de puerta virtual o virtual gates se estableció para recopilar dicha información física, que es recogida por diferentes sensores. Una puerta automática de una terminal, con cámara LPR, lector OCR y cabina para actuar con el chofer, puede ser considerada un objeto que recoge datos. Estos datos pueden ser transmitidos en tiempo real a un servicio web que los integre en los sistemas compartidos. Este el concepto de las virtual gates.
Virtual Gates ha servido para automatizar las salidas aduaneras, lo que se conoce como Sistema Integrado de Control Aduanero (SICAD). El SICAD está implantado en BEST- Hutchison, APM Terminals Barcelona y Barcelona Grimaldi Terminal.
Grimalt afirma, sobre los datos que se transmiten en tiempo real a la autoridad portuaria, que «Con toda esta información se han podido agilizar y “virtualizar” todos los trámites aduaneros de las terminales de contenedores. Conectamos con las aduanas y podemos saber, en todo momento y de forma automática, si los camiones pueden salir con sus mercancías». Sin duda, la tecnología y la innovación son elementos clave para facilitar qué es lo que está ocurriendo en tiempo real, ofrecer nuevos servicios a partir del flujo de datos y digitalizar procesos.
Las mejoras se traducen en un ahorro de tiempo para todas las partes implicadas y un plus ecosostenible. Se rompe con la forma tradicional de acceder y salir de la terminal, que suponía varias horas entre trámites burocráticos y de control, sin olvidar el aumento de las emisiones de gases a la atmósfera. «La salida de los camiones es más fluida, sin ningún tipo de detención o revisión por parte del personal del puerto o de las aduanas, con seguridad y transparencia», añade Grimalt. «Y, si el cliente final detecta algún tipo de incidencia, disponemos de información individualizada de cada operación, con lo que podemos aportar datos relevantes».
Otra solución que se ha podido desarrollar gracias a Virtual Gates es calcular el tiempo de espera de los vehículos antes de su entrada en el puerto. Esto es posible gracias a los datos de las puertas de las terminales en combinación con la información de las puertas de acceso al Port de Barcelona.
Smart data para soluciones aún más smart
A través de las virtual gates se extraen muchísimos datos sobre lo que sucede en el puerto: el tiempo que destinan los camiones en las terminales, afluencia por días y horas, principales incidencias, etc. Gracias a la inteligencia artificial y el big data ya se pueden realizar modelos predictivos a 20 minutos vista, de forma que en poco tiempo se prevé un salto cualitativo importante. Pero, ¿cómo se trata toda esa información para poder sacarle el máximo provecho? Ya lo ejemplificó Lluís Miró, consultor del Área de Logística y Puertos en IDOM, el machine learning funciona como las neuronas del cerebro. Va transformando los valores de entrada, capa a capa, hasta conseguir las variables que se desean predecir. El camino a seguir es: registrar, analizar, simular, prever y, finalmente, recomendar.
Grimalt subraya la importancia de sacar el máximo partido al aprendizaje automático para un Smart Port: «Llevamos 5 o 6 años recogiendo información de las virtual gates, y hemos podido aplicar algoritmos conocidos como machine learning o inteligencia artificial, no solo para conocer lo que está pasando, sino también para predecir lo que va a pasar en el futuro».
Una vez más, el Port de Barcelona se suma a la vertiente smart al aplicar estas técnicas de análisis predictivo y prescriptivo como herramientas de soporte a la toma de decisiones en la planificación del transporte de los actores de la cadena logístico-portuaria. Y no solo en los camiones, ya que la misma lógica del transporte por carretera puede aplicarse a cualquier otro medio de transporte (ferroviario, marítimo o fluvial).